Secadores Por Pulverización

Aplicación

En un sistema típico de secado por pulverización, se introduce una pasta aguada orgánica en el tanque de secado mediante la boquilla de pulverización. Cuando la nube pulverizada de material está bajo la influencia de la gravedad, una corriente entrante de aire caliente la seca. El material secado sale de la sección de la tolva, en la que puede recibir un secado o enfriado extra de un secador/refrigerador de lecho fluidizado, antes de introducirse en un separador de polvo, como un recolector de polvo o un ciclón (tal y como se muestra). Pueden utilizarse varios separadores.

Peligro

Normalmente, un sistema de secado por pulverización representa un gran volumen de material potencialmente explosivo. Aunque el material entra en el secador como pulverización húmeda, se seca rápidamente y se hace más sensible a la ignición. Esta ignición puede producirse por las partículas combustibles entrantes de un calentador de gas o combustible, que puede llegar a temperaturas de 260 °C (500 °F). La ignición también puede proceder de los componentes inferiores del proceso y de la autoignición de los depósitos de material del secador.

Consideraciones sobre el sistema de protección

Los sistemas de protección para sistemas de secado deben adaptarse a la necesidad de mantener las paredes interiores del tanque lisas. Esto es así para evitar la acumulación de producto y para que el secador y el ciclón funcionen eficientemente. Los sistemas de supresión de IEP Technologies lo logran utilizando ensamblajes esparcidores de descargas para la dispersión de supresores.

Descripción del sistema de protección

Los sistemas de secado normalmente están en dos zonas. La primera zona seca el material. La segunda zona separa el material seco de la corriente de aire. Como consecuencia, el sistema de supresión de explosiones utilizado normalmente es un sistema de dos zonas. El tanque de secado y los tanques de separación del polvo tienen zonas de protección que funcionan de manera independiente unas de otras, al mismo tiempo que proporcionan barreras de aislamiento para reducir la propagación de la explosión entre tanques conectados. En dicho sistema, los detectores de presión de explosiones montados en el secador y el separador del polvo detectan la variación de la presión de una explosión inminente. Los detectores transmiten una señal al panel de control. Esto dispara los supresores de descarga de tasa elevada en la zona afectada, que rápidamente descarga el supresor en un intento de apagar la bola de fuego antes de que se alcancen las presiones máximas. Los extintores de aislamiento montados en los conductos reducen la propagación de explosiones al equipo conectado del proceso. La unidad de control también detiene el proceso automáticamente, lo cual reduce la transferencia de materiales combustibles, polvo y aire.